Mon, 04/Apr/2022 - 02:13 pm By Anand
Orbital Marine Power O2: la turbina di marea rivoluzionaria

 

El reino de la energía verde está lleno de emocionantes posibilidades. Para naciones insulares como el Reino Unido, la promesa de la energía mareomotriz siempre ha sido atractiva. Esto se debe a la geografía única del país y al potencial para este tipo de generación de energía. No debería sorprender entonces que el O2, la turbina mareomotriz más potente del mundo, se esté desarrollando allí. Opera en las remotas Islas Orcadas frente a la costa norte de Escocia.

¿Qué es el O2?
Dada la gran escala y la naturaleza de alta tecnología del dispositivo, se podría pensar que el O2 es una especie de equipo militar de última generación. Por el contrario, en realidad es una gran turbina mareomotriz de 680 toneladas creada por Orbital Marine Power, con sede en el Reino Unido. Con 243 pies de largo, tiene aproximadamente el mismo tamaño que un Boeing 747 de largo. Sus brazos de sujeción del rotor alcanzan los 59 pies por debajo de la superficie del agua, donde los rotores de 66 pies luego barren un área de 6,458 pies cuadrados.

El O2 operará en la base de operaciones de la compañía en las Islas Orcadas. La razón para elegir Orkney como el primer sitio para albergar una unidad de O2 no es una elección arbitraria. Es porque Orkney alberga algunas de las corrientes de marea más fuertes del mundo, a veces superiores a los 3 m/s. Aprovechando esta energía de las mareas, el O2 se utilizará para ayudar a alimentar los hogares que conforman la comunidad de Orkney, proporcionando energía local, limpia y verde.

El O2: Tecnología
La energía de las mareas se ha generado antes, entonces, ¿qué tiene de especial la tecnología detrás del nuevo sistema de Orbital? La unidad O2 funciona utilizando una plataforma flotante única desarrollada íntegramente por Orbital. Está amarrado al lecho marino mediante fuertes anclas que lo mantienen en su lugar incluso durante las corrientes de marea más fuertes. Estos flujos de agua se capturan mediante rotores submarinos unidos a patas ajustables.

Una parte particularmente ingeniosa del diseño del rotor es que se pueden invertir entre diferentes ciclos de marea. Esto significa que el O2 es capaz de capturar flujos de marea generadores de energía sin importar en qué dirección vayan. La energía generada se envía a través de cables a la red eléctrica adjunta.

Las patas comienzan en un nivel horizontal que coincide con la unidad de O2 flotante, pero luego descienden al agua cuando llega el momento de activar los rotores generadores de energía. La belleza de este sistema es que el O2 se puede mantener y reparar de manera segura mientras aún está amarrado en su lugar, ya que las patas pueden volver a subir al nivel del agua para que los técnicos e ingenieros trabajen en ellas. Además, a pesar de su gran peso, aún puede ser remolcado por remolcadores típicos económicos, lo que hace que ponerlo en su lugar y llevarlo a la costa sea una propuesta relativamente rentable.

¿El futuro de la energía verde?
Si tiene éxito, ¿por qué el O2 y unidades similares podrían convertirse en una alternativa más viable a la energía eólica y solar? Por un lado, el agua es mucho más densa en energía que el aire, lo que significa que incluso con rotores más pequeños, una corriente de marea que se mueve a 4 m/s puede producir mucha más energía que con el viento. Además, las mareas se pueden predecir y depender de ellas, a diferencia del viento y la luz del sol. Mientras tengamos la luna en su lugar, sabemos dónde estarán las mareas y qué tan fuertes.

A pesar de estos hechos emocionantes, incluso el director ejecutivo de Orbital, Andrew Scott, admite que no es una solución milagrosa para resolver el cambio climático o las crisis energéticas. La empresa ha probado con éxito su prototipo, el SR2000, en las aguas de Orkney. Con el concepto probado, el camino está despejado para la implementación del O2 para ver cómo puede funcionar a mayor escala. Obtenga más información sobre Orbital y la turbina mareomotriz O2 en su sitio web.

 


The realm of green energy is full of exciting possibilities. For island nations like the UK, the promise of tidal power has always been attractive. This is owing to the country’s unique geography and potential for this type of energy generation. It should be no surprise then that the O2, the most powerful tidal turbine in the world, is being developed there. It operates in the remote Orkney Islands off the north coast of Scotland.

What is the O2?

Given the grand scale and high-tech nature of the device, you might think that the O2 is some kind of next-generation military equipment. On the contrary, it is in fact a large, 680-ton tidal turbine created by UK-based Orbital Marine Power. At 243 feet long, it’s about the same size as a Boeing 747 in length. Its rotor-holding arms reach 59 feet below the surface of the water, where the 66-foot rotors then sweep an area of 6,458 square feet.

The O2 will operate in the company’s homebase of the Orkney Islands. The reason for choosing Orkney as the first site to host an O2 unit isn’t an arbitrary choice. It’s because Orkney is home to some of the strongest tidal currents in the world, sometimes in excess of 3m/s. Harnessing this tidal power, the O2 will be used to help power the homes that make up the Orkney community, delivering local, clean and green energy.

The O2: Technology

Tidal power has been generated before, so what’s so special about the technology behind Orbital’s new system? The O2 unit works using a unique floating platform developed entirely by Orbital. It’s moored to the seabed using strong anchors that hold it in place even during the strongest tidal streams. These flows of water are captured using underwater rotors attached to adjustable legs.

A particularly ingenious part of the rotor design is that they can be reversed in between different tide cycles. This means that the O2 is capable of capturing power-generating tidal flows no matter in which direction they are going. Power generated is sent via cables to the attached electricity grid.

The legs begin at a horizontal level matching the floating O2 unit, but these then lower themselves into the water when it’s time to activate the power-generating rotors. The beauty of this system is that the O2 can be safely maintained and repaired while it’s still moored in place as the legs can be brought back up to water level to be worked on by technicians and engineers. In addition, despite its large heft, it can still be towed by inexpensive typical tugboats, which makes putting in place and bringing it back to shore a relatively cost-effective proposition.

The Future of Green Energy?

If successful, why could the O2 and units like it become a more viable alternative to wind and solar power? For one thing, water is much more energy-dense than air, meaning that even with smaller rotors, a lot more energy can be produced by a tidal stream moving 4m/s than with wind. What’s more, tides can be predicted and depended upon, unlike wind and sunshine. As long as we have the moon in place, we know where the tides will be and how strong.

Despite these exciting facts, even Orbital’s CEO Andrew Scott admits it isn’t a “silver bullet” to solve climate change or energy crises. The company has successfully tested its prototype, the SR2000 in the Orkney waters. With the concept proved, the way is clear for implementation of the O2 to see how this can work on a bigger scale. Learn more about Orbital and the O2 tidal turbine on their website.